Entramos en 2014, vamos a perder peso, vamos a dejar el tabaco, vamos a ponernos a estudiar inglés, vamos a apuntarnos al gimnasio, no habremos escuchado veces ese tipo de cosas, pero entrar en un nuevo año no debe suponer eso, porque todos sabemos que al final casi nada de eso se cumple, son sólo estupideces que usamos para intentar que el año en el que entramos sea diferente, siento ser demasiado pesimista, pero si queremos que el año sea diferente tenemos que cambiar en otro ámbito, tenemos que cambiar desde dentro, puesto que si nos fijamos un poco casi todas las propuestas para el nuevo año se basan en la superficialidad y no estoy diciendo que eso esté mal, sino que realmente el cambio está desde abajo, en vez de apuntarnos al gimnasio debemos querernos un poco más a nosotros mismos, aceptarnos como somos y empezar a convertirnos en lo que queremos ser, pero lo más importante es no hacerlo para agradar a alguien, esa no es la forma. Lo de dejar el tabaco, bueno, soy fumador y la verdad, es que no me parece algo tan grave, soy consciente de que no es nada bueno, pero tampoco me preocupo excesivamente por ello.
Para mi este nuevo año que entra quiero que sea para dejar de preocuparme demasiado por las cosas, querer a quien me quiere y dejar de hacerlo a quien no lo merece, parece demasiado fácil, pero para mi no, quizás también deba empezar a ponerme algo en forma, por cuestiones de salud, pero soy demasiado vago, la verdad, sinceramente la entrada de año no ha supuesto nada representativo y con que el año que entra sea un poco más interesante que el pasado.